No me considero ni una santa ni una puta, al menos no una guarra del todo, integral, guarraza 100 % sin limites sexuales y ni mucho menos una enferma. Sé que para alguna chica y muchos chicos debo de ser una degenerada por grabarme vídeos metiéndome una polla de plástico negra enorme. Y si, la verdad, yo puede que también lo pensará al principio de mi misma, pero ahora no. Ahora solo sé que después de estar con mi cámara y mi dildo de 46 centímetros de largo por 12 de diámetro, soy la chica mas feliz del mundo y si, MI COÑO LO DISFRUTA. Espero que vosotros también.
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